jueves, 9 de febrero de 2012

“La fe filosófica ante la revelación bíblica”. Karl Jaspers (12 de Marzo de 2012).

RESUMEN DEL TRABAJO
Introducción.
  Desde dónde hemos de vivir.
  .De  la fe en la revelación  o  nihilismo.
  Desde el entendimiento humano (ciencia)  o  ilusiones.
   La filosofía medieval tenía una precaria y aparente autonomía.
   En el siglo XIX, la filosofía dejó de vivir como criada de la teología.
    Fe en la revelación o nihilismo --- ciencia total o ilusión descomponen las posibilidades en antítesis entre las cuales cesa el verdadero ser-humano.
    No pensar de acuerdo a esas categorías es ser objeto de causaciones tales como: inconsecuencia, saber a medias, etc.
  Se debe mantener abierto en el filosofar nuestro ser-humano.
  El filosofar toma conciencia de su independencia, al encontrar la concordancia con el origen mismo.
  Creer es distinto de saber. Giordano Bruno creía y Galileo sabía.
  Sócrates, Boecio y Bruno son figuras, vistas con veneración, de la confirmación de una fe filosófica a la manera de los mártires.
  La fe no es lo irracional. Esta polaridad de lo racional e irracional constituye la confusión de la existencia.
¿Qué es la fe filosófica?
  1. No es ese sumirse en lo oscuro de lo contrario a entendimiento y de lo ajeno a toda ley.
  2. La fe filosófica, la fe del hombre que piensa, tiene siempre la nota de que sólo es en alianza con el saber.
  3. El conocer ilimitado es el elemento fundador del filosofar.
  4. La fe filosófica quiere aclararse a sí misma. Filosofando no acepto nada simplemente, sin penetrarlo totalmente.
  5. La fe filosófica no puede tornarse saber de validez universal, sino que debe hacérsenos presente por autoconvicción.
  6. La fe filosófica en sentido más amplio es certidumbre de la realidad, evidencia, idea.
  7. Más apropiadamente la fe es acto de la ex-sistencia, en que se adquiere conciencia de la trascendencia en su realidad.   La fe filosófica, con sensible conciencia contra la superstición, es incapaz de  confesarse en tesis.
  8. La fe filosófica pasa a través de la nada, pero no crece sin un terreno que la sustente. Está en la tradición.
  9.  La fe filosófica se ve entregada, sin seguridades, sin garantías.
  10. La fe filosófica no adopta una postura de obediencia frente a la filosofía tradicional, no invoca revelación ni autoridad.
«La filosofía contrariamente a la fe revelada no hace propaganda, deja a cada cual su libre decisión. Ni anuncia ni fuerza la convicción. En ella, los hombres libres se encuentran en tanto que compañeros con un destino común. Según algunos mi manera de filosofar debiera conducir a la Fe revelada, pero tal no es en absoluto mi intención. Yo mismo no puedo dejar de pensar, con Kant, que si la Revelación fuese una realidad, constituiría un desastre para la libertad creada del ser humano». En definitiva, la fe filosófica: «Busca, no la hostilidad sino la lealtad, no la ruptura sino la comunicación, no la violencia sino la liberalidad».
¿Qué significa, pues, fe?
     Si la fe no es:
  1. Sólo contenido.
  2. Únicamente un acto del sujeto.
  Y tiene sus raíces en lo que sostiene la fenomenicidad.
  Entonces ha de hacerse presente sólo en lo que no es objeto y sujeto, sino ambos en uno. Esto es lo abarcador, el ser que no es sólo sujeto u objeto, antes bien comprende ambos lados del dualismo sujeto-objeto.
  Fe es una inmediatidad en contraste con todo lo mediado por el entendimiento.
  La fe es una vivencia de lo abarcador, vivencia que puede concedérsenos o no.
        La fe filosófica es la vida desde lo abarcador, es guiarse y cumplirse por lo         abarcador.
        La fe filosófica desde lo abarcador es libre porque no está fija en un finito absolutizado. Tiene el carácter de lo fluctuante- no sé si creo ni qué creo.
  Kierkegaard considera que el rasgo esencial de la fe estriba en que vaya a una singularidad histórica y sea a su vez histórica. Es percatarse del ser desde el origen mediante la historia y el pensamiento.
  La fe filosófica debe caracterizarse negativamente:
  1. No puede tornarse confesión.
  2. Su pensamiento no pasa a ser dogma.
  La fe filosófica no puede apoyarse en algo finito objetivo en el mundo, porque se limita a utilizar sus tesis, conceptos y métodos, pero sin someterse a ellos.
  Su sustancia es absolutamente histórica y no debe fijarse en lo universal, ni fijarse como estado histórico, sino sólo hacerse cierto históricamente por movimiento temporal. Eso sucede en el ámbito de lo abarcador.
¿Qué es lo abarcador?
  Lo abarcador que soy yo, es en toda figura una polaridad de sujeto y objeto. Yo soy:
1.     A título de existencia: mundo interior y mundo ambiente.
Yo existo, las cosas existen. Hay una naturalización del misterio.
2.     A título de conciencia en general: conciencia y objeto.
Advierto la validez de lo justo, del no-cabe-otra-posibilidad.
3.     A título de espíritu: la idea que hay en mí y la idea objetiva que me viene de las cosas.
        Estoy lleno de ideas mediante las cuales capto la idea que me sale al paso. Cuando las ideas desaparecen, el mundo se desploma en las infinitudes de los objetos dispersos.
4.     A título de ex-sistencia: ex-sistancia y trascendencia.
Soy en cuanto me sé regalado. Mi ser-por-mí es un ser-me-regalado.
La antropología jasperiana (¿qué soy?)
  El ser que somos nosotros.
  Modos en que adquirimos conciencia de nuestro ser:
  1. Somos existencia. Lo abarcador de este ser vivo es objeto de investigación en sus manifestaciones, en las producciones de la vida, en la forma del cuerpo, en vivencias psicológicas, etc. El hombre produce lenguajes, instrumentos, creaciones, hazañas y se produce a sí mismo objetivamente. Su existencia tiene la plenitud de su manifestación si se presentan en ella los siguientes modos de lo abarcador:
  2. En el dualismo sujeto-objeto, somos conciencia en general. Somos conciencia abarcadora. Sólo lo que se presenta en esa conciencia es ser para nosotros.
  3. Somos espíritu. Vida espiritual es vida de ideas.
Existencia, conciencia en general y espíritu= tres modos de lo abarcante.
  1. Somos ex-sistencia posible. Nuestra esencia se manifiesta en:
Lo insuficiente que el hombre experimenta en sí, pues hay una constante inadecuación a su existencia, a su mundo espiritual.
En el impulso a lo uno. En el incesante impulso a lo uno. En el afán de la unidad de fondo, pues sólo ella es el ser y la eternidad.
En la conciencia de la inmortalidad, que no es supervivencia en otra forma, sino un estar-alojado en la eternidad anuladora del tiempo.
Características del Dasein (ser ahí)
1.- Cada Dasein es único y singular: yo soy siempre tan sólo un único Dasein.
2.- El Dasein vive en un entorno concreto que percibe y en el cual actúa.
3.- Nace y muere entre otros Dasein que nacen y mueren antes y después de él.
4.- Está animado de deseos y voluntades, quiere vivir y ser feliz –pero cualquier plenitud que logre es momentánea, no permanece.
5.- Queriendo vivir y sintiéndose amenazado, busca la potencia y no rehúye la lucha. Mientras vive, vive también su inquietud.
6.- Es englobante, pues nada es real para mí, ni siquiera yo mismo, sino actualizándose como mi “ser ahí”. Dasein es, pues, también mi cuerpo, siempre presente y por el que todo debe pasar.
7.- Sabe que podría no ser pero es realmente y a la vez no constituye su propia creación. Vive a la vez en retiro y en acción en Lo Englobante.
Concepción gnoseológica (¿Qué sé?)
  Todo lo que sé, está en el dualismo sujeto-objeto, es objeto para mí, es fenómeno, no en sí. Lo que experimento como ser, está siempre en el dualismo sujeto-objeto, no sólo en un lado.
  El dualismo sujeto-objeto es múltiple:
  1. La existencia está en su mundo como mundo ambiente.
  2. La conciencia en general está frente a objetos.
  3. El espíritu vive en ideas.
  4. La ex-sistencia está referida a la trascendencia.
       Mundo ambiente, ideas y trascendencia se convierten en objetos pensados sólo en la conciencia en general por objetivación en esquemas y símbolos. Lo que sé es, pues, en cada momento un ser-objetivo en la conciencia en general y, en consecuencia limitado; pero en su finitud es un trampolín para saltar al trascender.
Concepción ontológica (¿Qué es el ser?)
  Respuestas típicas que se han dado por el ser.
  1. Primero se tuvo por el ser o base de todo lo que es-------  la materia (el ser es objeto).
  2. El ser es producto del yo------  todo ser parte de lo subjetivo.
  3. El ser era la estructura del pensamiento que hacen comprender todo ser (categorías) porque se hallan en el ser mismo.
  4. El ser propiamente dicho, que no es objeto ni sujeto, sino que se manifiesta en el conjunto del dualismo sujeto-objeto, y que debe cumplir las categorías para darles sentido y significación, es lo que hemos denominado lo abarcador.
       El ser propiamente dicho es la trascendencia (o Dios), es una proposición cuya verdadera comprensión encierra en sí toda fe filosófica.
Los contenidos de la fe filosófica
  Dios es: La trascendencia más allá de todo mundo o ante todo mundo.
  Un Dios demostrado no es un Dios. Sólo quien parta de Dios, puede buscarlo. Una certidumbre del ser de Dios, por rudimentaria e incomprensible que sea, es requisito previo, no resultado del filosofar.
  Características:
  El Dios único: Lo Uno pasa a ser fundamento de la conciencia del ser y del ethos.
  La trascendencia del Dios Creador: Un Dios sin imagen, inimaginable. El mundo carece de asiento y no es de por sí. El hombre adquiere su libertad a título de ser-creado por Dios.
  Encuentro del hombre con Dios: El ser de Dios tiene un aspecto personal.
  Mandamientos de Dios: La diferencia entre bien y mal se concibe en relación a los mandamientos.
  Conciencia de la historicidad: La historia es guiada por Dios, por la presencia sustentada por Dios.
  El sufrimiento: Se torna camino a la divinidad, cobra dignidad. Se convierte en el polo opuesto a lo trágico de los griegos. Se vive en una conciencia trágica superada.
  Franqueza para los insolubles: La certeza de la fe se expone a la más extrema verificación. La pasión de la lucha por Dios contra Dios resulta única en Jacob. La desesperación de la nada –como tránsito ineludible para el sincero– se formula de un modo insuperado en el Eclesiastés.
Desviaciones de estas creencias
  1. El Dios único se hace abstracto. Es algo negativo hacia todo ser del mundo y hacia la pluralidad y plenitud de éste.
  2. El Dios trascendente se desprende del mundo. Dios sin creación es un pensamiento en que todo desaparece.
  3. El encuentro con Dios se torna interesado o se convierte en abandono sentimental.
  4. Los mandamientos de Dios se convierten en abstractos preceptos de sentido jurídico y se desarrollan en disposiciones particulares.
  5. La conciencia de la historicidad se pierde en una visión histórico-objetiva.
  6. El sufrimiento se convierte en placer masoquista o se afirma sádicamente.
  7. La franqueza para los insolubles conduce a la desesperación o al nihilismo.
Filosofía y religión
Cuadro comparativo


Religión

Filosofía

Postura dogmática.
Postura racional
  Propone verdades únicas.

  Verdad de la philosophia perennis
  Paraliza la comunicación, puesto que cree estar en la posesión definitiva de la verdad.

  Fomenta la discusión, puesto que se nutre de distintas ideas filosóficas.

  Tiene un culto, va asociada a una particular comunidad humana, y es inseparable del mito.

  No tiene culto ni comunidad dirigida sacerdotalmente, ni santidad en el mundo deslindada del resto del mundo.

  Referencia del hombre a la trascendencia como fundamento explicativo.

  Nació para el individuo en relaciones libres, no sociológicamente reales.

  Tiene ritos y mitos originariamente reales.

  Carece de ritos y de mitos originarios.

  Su conocimiento se funda en revelaciones, mediante la palabra, la exigencia, la acción, el acaecimiento.

  Lo que de la revelación interesa al hombre como hombre, se torna contenido de la filosofía y como tal vale sin revelación.

  Tiende a ser conservadora.

  Amplía constantemente su horizonte.

  Tiende a la encarnación viva.

  Tiende a la certidumbre eficiente.

  Para la religión, el dios de la filosofía es pobre, desteñido, vacuo. La actitud filosófica es calificada de deísmo.

  Para la filosofía, las encarnaciones religiosas son capciosa paliación y errónea aproximación.

  La religión mira de reojo al dios de la filosofía como mera abstracción.

  La filosofía desconfía de las imágenes religiosas de Dios considerándolas seducción de ídolos.



Carácter negativo que la Biblia tiene para el filosofar
El contenido de la fe no sólo se considera como verdad absoluta, sino exclusiva.
ABSOLUTO        
1.      No es universal, sino histórico, en la impenetrable vivacidad del obrar presente.
2.      Es inconsciente, por mucho que sea lo que a partir de él pueda saberse y decirse.
3.      Es irreemplazable, y por lo tanto singular cada vez.
EXCLUSIVO
1.      Sólo en el ámbito de la religión bíblica se lleva hasta las últimas consecuencias.
2.      Conduce a la pretensión de dominio universal.
3.      Genera la ruptura de comunicaciones y la prohibición de la razón.
4.      Fomenta la violencia ideológica, racial y cultural.
Carácter positivo que la Biblia tiene para el filosofar
  Se imponen las más extremas antítesis ineludibles racionalmente. Todo aparece en polaridad.
  La religión de la ley y del amor.
  La religión sacerdotal y la libre religión deprecatoria del individuo.
  El Dios nacional y universal.
  El pueblo elegido y la alianza con el hombre como hombre.
  Religión mágica y religión ética de la idea racional de la creación.
  Sus textos contienen condensaciones espirituales de las realidades humanas más primitivas y más sublimes.
  La autoconciencia filosófica falta, salvo en gérmenes pequeños. La pasión se corrige con la pasión.       
  Se ve al hombre en los modos fundamentales de su fracasar. Es allí donde se hacen presentes la experiencia del ser y la realización.
  Existe un esclarecimiento y exaltación de lo eternamente verdadero.        
  La filosofía occidental se pronuncia a favor de la religión bíblica. Todos los filósofos filosofaron con un profundo conocimiento de la Biblia.
Los contenidos de la Biblia no pueden sernos suplidos por ningún otro libro.
Tres criterios que hacen grande a un filósofo
  En primer lugar, están por encima de su tiempo.
  Grande no es sólo quien capta su época con ayuda de sus pensamientos, sino el que a través de ellos toca la eternidad.
  En segundo lugar, todo pensador auténtico es original, como todo hombre grande es natural y verdadero.
  Pero el gran pensador es original en el seno de su carácter original. Es decir, aporta al mundo una comunicabilidad que antes de él no existía.
  En tercer lugar, el gran filósofo ha adquirido una independencia interior desprovista de rigidez.
  No es la independencia del amor propio, del desafío, de la doctrina sostenida con fanatismo. La independencia del filósofo es obertura permanente. Soporta ser distinto a los demás sin desearlo. Planta cara a la soledad.
Filosofía e infilosofía
  La infilosofía se viste con la indumentaria de la filosofía. Asume una posición de incredulidad, porque vive en la apariencia, en realidades aisladas, en imágenes del mundo.
  El hombre filosófico se realiza venciendo la infilosofía siempre presente en él.
  La incredulidad no está nunca en el ser, más no puede menos que admitir un sucedáneo de ser en contenidos de superstición.
  Tres ejemplos de incredulidad filosófica:
  1. La demonología.
  2. La divinización de hombres.
  3. El nihilismo.
Demonología
  1. Una concepción que con convicción directa ve el ser en potencias, en fuerzas activas, configuradoras– constructivas y destructivas--, en demonios—benévolos y malignos--, en muchos dioses, piensa lo visto y lo formula como doctrina.
   Lo inmanente es experimentado como divino, la pasión, el poder, la vitalidad, la     belleza, la destrucción, la crueldad. Se produce una santificación tanto de lo bueno como de lo malo.
  Es una ilusión el tratar los demonios como realidades, aceptarlos como facticidades, calcular con ellos. No hay demonios.
  1. Lo demoníaco como expresión de algo incomprensible. Ya no se trata de demonios, sino de lo demoníaco. Se trata de algo no querido, trastocado, contingente.
  2. Demoníaco es el hombre que quiere sostener absolutamente su yo. Lo demoníaco como porfiado querer el propio yo contingente es el desesperado-querer-ser-uno-mismo.
  3. Lo demoníaco se emplea para todo lo irracional. Lo no querido, que se presenta inesperadamente al realizarse lo querido, se llama demoníaco.
  4. Se denomina demoníaco lo inconsciente cuando lo no aclarado y no aclarable se impone desde las profundidades de la vida psíquica del hombre.
Divinización de los hombres
  1. Es un fenómeno universal que los hombres adoren con delirio a un individuo, lo eleven a superhombre, vean realizado en él el ideal del ser humano. Ej. Gandhi tenía que protegerse contra los buscadores de darshan (visión de un santo). También, en siglos anteriores, cuando los reyes se mostraban al pueblo, su presencia curaba a los enfermos.
  2. La divinización repercute en los divinizados. La gente tortura al que ellos consideran como santo, obligándole a que se comporte como tal.
  3. La figura más visible del poder humano son los soberanos y los jefes militares. Quien no obedece  la ley con libertad, se ve obligado a obedecer a la fuerza exterior. Así, el tirano, a modo de instrumento del mal para castigar el mal, se convierte en objeto de divinización. Ej. Napoleón, Alejandro, César.
  4. Los tiranos se tornan dioses. Ej. Alejandro fue denominado hijo de Dios; los dioses emperadores romanos realizaron el culto tributado a su numen.
  5. Más de un filósofo de la Antigüedad fue elevado a demonio o héroe. La propensión a convertirlos en mito es inextirpable.
  6. La divinización de los hombres es uno de los factores de la formación de las grandes religiones.
  7. Se diviniza a los hombres, porque en el hombre existe la inclinación a ver a un hombre perfecto, que viene a ser para él, lo que él mismo desearía ser y no es capaz de ser.
  8. La divinización de los hombres es uno de los modos de concepción demonológica. La impiedad toma hombres corpóreos para divinizarlos.
  • Nihilismo
  El nihilismo puede sumir esta posición:
  Puede tomarse en serio la experiencia de la nada.
  La marcha del mundo revela que todo aquello que tenía valor, se hunde como ilusión.
  El pensamiento nihilista sólo puede negar partiendo de algo reconocido, midiéndolos por lo cual se revelan la nada, la decepción, el engaño, la mentira, la ilusión.
Preguntas para reflexionar:
1.      ¿Cuáles son las características más importantes de la fe filosófica?
2.      ¿Cuáles son las características de lo abarcador que soy yo?
3.      Mencione los atributos y condiciones del Dasein. Compárelos con aquello que la Biblia menciona acerca del hombre.
4.      ¿Cuál es el alcance del saber?
5.      Mencione los contenidos de la fe filosófica y sus desviaciones.
6.      ¿Qué diferencias existen entre la Filosofía y la Religión?
7.      ¿Cuáles son las consecuencias del carácter negativo que tiene la Biblia para el filosofar?
8.      ¿Cuáles son los alcances del carácter positivo que tiene la Biblia para el filosofar?
9.      Mencione las tres características que hacen grande a un filósofo.
10     Mencione los tres ejemplos de incredulidad filosófica y desarrolle cada uno.
 
Claudio Gustavo Barone
                                                                                 Prof. de Filosofía en
                                                                                 Enseñanza media y superior (UBA)
                                                                                     Director del café filosófico y                        
                                                                                  Miembro de IECA